martes, 22 de abril de 2008

EL PAJAR. C/Luna, 3, y también C/Estrella, 4.


"Podemos pensar que, por su expresión, César está como desganao...¿Qué pasará por su cabeza? ¿El Pajar? ¿Será como en Tailandia, comida con "happy ending"?.- Joseba.

"El Pajar. Suena bien. Desde fuera, con esos hierros forjados, porchecito de tejas y maderámenes enormes, tiene pinta de lugar de esos que monta un tipo que, al segundo carajillo, te cuenta Me vine a Madriz con 15 años, a ver, qué remedio si éramos 8 hermanos, pero llevo mi pueblo en el corazón, y el restaurante que me monté con el sudor de mi frente quiero que me le recuerde...y eso sí, con comida de verdá y raciones como Dios manda, que el que venga a mi casa se vaya bien comío. ¿Será así?".- César.

"El Pajar. En España hay censados 758 locales con el mismo nombre. Y no es una cadena, no."- Miguel.


"Por este restaurán no pasa mucho Annie Leibowitz".- Joseba (Instantánea tomada por el camarero del local, y muy muy muy movida)

"La carta confirma las sospechas. Lo que se podría comer en la tierra natal del propietario de El Pajar, justo lo mismo, exactamente lo mismo, es lo que nos ofrece en su carta. Lo de toda la vida, el commoditie del menú español mesetario. Buenas vibraciones. De primero, ¿potaje o pochas con almejas?".- César-

"Tienen un menú que fideliza a la clientela. Qué guarrillas, pidieron cuajada de postre".- Joseba.

"Chicos, creo que hemos elegido bien. Estas veteranas saben dónde van a jalar, sí señor. Son como los camiones aparcados en un restaurante de carretera, un indicador infalible". César.

"Por lo variopinto del personal, se podría hacer un tratado sociodemográfico. Nonagenarias, soldados, curas, novicias, vendedores de seguros...Lo que viene a ser España."- Miguel.

"De esta imagen te pueden sorprender 2 cosas. El tamaño del gotelé de las paredes, o la afición de algunos hombres a ponerse esmalte de uñas":-  Joseba.

"Joder, qué estucao. Specially designed to frotarse los ciervos en berrea".- César.

"Hay gotelet y gotelet. Este es de altorrelieve, oiga."- Miguel.

"En este blog además de consejos culinarios queremos dar también consejos de decoración. Aquí va el primero".- Joseba.

"Ese tipo de atrezzo es lo que nos impide entrar en el G-8. También había aperos de labranza colgados por las paredes".- César.
"Detalle arqueológico de la decoración. Para que no nos olvidemos de dónde venimos".- César.
"Menú, 11 euros. Como se ve en la cuenta, las aceitunas son por cuenta de la casa".- Joseba.

"Muy buena la zampa, sí señor. De lo mejorcito en menús patrios por la zona. Hoy, amigos, hemos "comido caliente". Idea para empresarios de hostelería emprendedores: ¿no podría ser un local modernete, molón, pero con esta comida de cuchara, que no haya que comerse un humus o un tataki por cojones? O sea, juntar lo mejor de los dos mundos."- César.

"Calidad-precio muy requetebuena. Podríamos destacar las lentejas, pero el emperador también está muy por encima de lo esperado."- Miguel.


COMENTARIOS GENERALES:

- Puedes acceder por dos calles distintas. 
- Momentos de especial nostalgia al ver una foto del pueblo (suponemos que) del dueño como fondo de un reloj de pared.
- Al salir, el camarero te ayuda a ponerte el abrigo. Qué majete. Si ni siquiera dejamos propina.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

os puedo sugerir Casa Fidel en la calle escorial?
me da que os va a gustar!

Anónimo dijo...

Esas dos señoras son parroquianas habituales, y siempre están en esa mesa.

Anónimo dijo...

Habiendo comido un montón de veces en El Pajar os recomiendo (si afortunadamente están en el menú):

La falda asada; sorprendentemente tierna y ligera, casi parece cochinillo
El potaje; absolutamente clásico
Las setas a la plancha (hace tiempo que no las veo en el menú)
El gazpacho

Con esto no quiero decir que el resto de platos no me gusten; al contrario.

La gente de El Pajar es encantadora ; te miman como cliente. Se disculpa el hecho de que haya algunas cerámicas "poco constitucionales"

Es el sitio que cualquier visitante de la ciudad, uyendo del caos de la Gran Vía, y queriendo encontrar un mantel sobre el que comer comida de verdad querría encontrar.

PD.- No trabajo en el Pajar ni soy familia, conste; sólo un vecino, cliente y amigo agradecido por tantos momentos cálidos

Anónimo dijo...

Lamento leer que vuestros comentarios se centran mucho en la decoración del restaurante y menos en la carta... He tenido la gran suerte de disfrutar de sus guisos y su trato siempre exquisito.
Dudo de vuestras intenciones con este blog, supongo que no solo quereis conocer y recomendar nuestra cocina "española" sino también darle un toque burlón rozando en algunos casos lo desagradable.